Actualmente el tema de la Depresión en los niños es un tema cada vez más recurrente y alarmante por las cifras que día a día aumentan, al ser este considerado un trastorno emocional.
Históricamente la Depresión Infantil como concepto no es aceptada solo hasta la década de los sesenta, se reconoce oficialmente hasta 1971, a partir de ahí el análisis de la depresión infantil la interpretación de sus causas y la descripción sus síntomas han proliferado desde todos los campos teóricos.
Los síntomas más relevantes relacionados con la depresión infantil son la tristeza, la falta de afecto que acusa el niño, los sentimientos de soledad y de culpabilidad, conducta agresiva, baja autoestima y pérdida de apetito.
Como en los adultos, destaca la mayor interiorización del problema en las niñas, entre algunos de los factores que contribuyen a la incidencia se pueden señalar las siguientes:
La crisis de la familia. El estrés.Entre los síntomas de los cuadros depresivos que conforman el estado de ánimo, el sentimiento de tristeza ocupa un lugar secundario, el comienzo de la depresión suele ser gradual, pero con episodios de agudización sienten apatía, aburrimiento, se desvinculan de sus amigos y disminuyen su actividad.
Hoy en día entre las causas de la Depresión Infantil también encontramos el “Buillyng” los niños al sentirse amenazados por alguien más en la escuela tienden a apartarse de los demás muestran hastío y rechazo hacía esta, este debe ser un foco rojo para que los padres se den cuenta que “algo” está pasando así se puede evitar el suicidio en los menores al sentir que no encuentran salida de su problemática.
Se hablaba mucho sobre el mito de que los niños no se deprimían pues aparentemente no tenían motivo para hacerlo debemos reconocer que ellos tienen una sensibilidad especial por medio de la cual se dan cuenta de todo lo que ocurre a su alrededor por tanto es casi una proeza “imposible” el ocultarles hecho o acontecimientos que se puedan suscitar dentro de su núcleo familiar aquí es más recomendable aprender a comunicarse con ellos y de esta forma cualquier conflicto puede ser hablado con ellos, fomentemos la confianza así tendremos un fácil acceso a sus problemáticas, sus preocupaciones y todo aquello que a ellos les provoque un conflicto.
Aquí les dejo una frase que hace poco tuve la oportunidad de leer y creo que encaja a la perfección con la moraleja que deseo regalarles hoy: “No te preocupes si el fin del mundo es hoy, ya es mañana en Australia” –Charles M. Shulz-
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