miércoles, 15 de diciembre de 2010

¿Después de ti?

¿DESPUÉS DE TI...?
La muerte, es algo que no tenemos asumido, pues lo consideramos "tan" ajeno a nosotros queramos o no tenemos que enfrentarnos a ella día a día en el mismo acto que nos implica ir a dormir por la noche sin saber del todo si tendremos la oportunidad de despertar.
Por medio de esta breve introducción quiero abordar el tema de la pérdida física y definitiva de un ser querido, el dolor del duelo implica una renuncia forzada, algunos de los objetivos del mismo son:
Elaborar: Un nuevo plan de vida.
Resituarse: Tener conciencia de mi realidad aqui y ahora.
Reubicar: Tomar ese amor que aun existe en mí ubicar alguien receptivo hacia el mismo. (hemos perdido a un ser querido, no asi la capacidad de amar)
De otro modo terminaremos cargando un cadáver sobre la espalda en un camino cuesta arriba, no es que no debamos llorar lo que hemos perdido sino, que es importante designar un espacio, un momento y un lugar para conectarnos con el dolor pues dicha actividad ordena y protege, en muchas ocasiones nos apegamos al recuerdo de lo que lloramos, para no olvidarlo pagando el precio de mi propio sufrimiento pactando una misteriosa lealtad con el ausente.
Cierto es que no es fácil re-incorporarnos a nuestra cotidianidad cuando sentimos que ya nada volverá a ser igual, cuando el sentimiento de vacío aun se encuentra latente, sin embargo mientras más tiempo transcurra sintiendo que el "mundo" no me comprende, más doloroso sera el proceso alargando el tiempo de adaptación hacia lo nuevo no es que sea fácil pero realmente es posible.
Vamos caminando por el mundo sin tomar conciencia de que cada momento es una oportunidad inigualable de aprender, crecer y vivir, cada encuentro con el otro puede significar al tiempo una despedida.
-La muerte no puede robar la vida, porque la vida es una antorcha que va de mano en mano, de hombre en hombre una transferencia que no tiene regreso- Hamlet Lima Quintana.Psicoterapeuta Andrea Ramírez
sallyplascencia@gmail.com
33.14.94.15.72.
31.26.65.12.
 
 

lunes, 13 de diciembre de 2010

DEPENDENCIA

"DEPENDENCIA"
La palabra "dependiente" deriva de pendiente, que quiere decir que cuelga que esta suspendido en el aire sin base, dependiente es aquel que se cuelga del otro, que vive como suspendido en el aire, como si fuera un adorno que ese otro lleva, es de alguien que esta cuesta abajo permanentemente incompleto eternamente sin resolución.
El amor siempre es positivo y maravilloso, nunca es negativo, pero puede ser la excusa que yo utilizo para volverme adicto(a) por eso se suele pensar que el co- dependiente no ama, él necesita, él reclama, él depende, pero no ama.
Idóneo seria empezar a deshacernos de nuestras adicciones a las personas, abandonar estos espacios de dependencia y ayudar al otro a que supere los mismos, me encantaria que la gente que yo quiero me quiera pero si esa gente no me quiere, me encantaría que me lo diga y se vaya porque no quiero estar al lado de quien no quiere estar conmigo... es muy doloroso pero siempre será mejor que si te quedarás engañándome.
Cierto que a todos nos gustaría evitar la odiosa frustración de no ser queridos, me vuelvo proveedor selectivo: te doy todo lo que quieras, trato de complacerte, me pongo a tu disposición intento que dependas de mí pues percibo que ser necesitado(a) se parece tanto a ser querido ... pero a veces pese a todo esto no consigo que me quieras ¿entonces? busco que me tengas lástima, quien no ha dicho:
"¡¿Cómo me haces esto a mi?!"
"No me importa si no me quieres yo si te quiero"
Y si no funciona para no ganarme tu indiferencia al menos quiero lograr que me odies, curiosamente a veces, nos encontramos con gente tan mala que no nos odia! que malas personas ¿o no? entonces llegamos a:
"Si no pude conseguir que me quieras o necesites, te negaste a tenerme lástima, a ocuparte de mí por piedad, no conseguí que me odies... solo me queda un camino... trataré que me temas..."
Este temor no solo es a lo que pueda llegar hacerte si no a lo que puedo llegar hacerme yo (suicidios, nos lastimamos a nosotros mismos etc) solo por poner algunos ejemplos pues muchas veces nuestra creatividad no tiene límite ¿o sí?
Todo esto no es otra cosa, que la terrible necesidad de tener lo que alguna vez fue, volver a depender del otro para notar que existo y soy valioso para alguien, pues se puede llegar a caer en el tan extraño miedo a "no existir" "no ser" "no estar" en este punto es importante recordar que muchas veces "para ser" se debe empezar "por no- ser"
Han dejado de engañarte, no de quererte y sufres como si hubiesen dejado de quererte... -Antonio Porchia-
 Psicoterapeuta Andrea Ramírez
sallyplascencia@gmail.com
33.14.94.15.72
31.26.65.12
"El camino de la Autodependencia, Bucay Jorge"